Si nos guiamos por las predicciones, es igual de recomendable observar la
madrugada del 18 y del 19. Afortundamente este año, al contrario que el pasado,
la luna no molestará, ya que está en cuarto creciente y se pone temprano.
La constelación de Leo, el radiante de donde salen los meteoros, no sale del
horizonte hasta la medianoche local, por tanto, observar antes no es necesario.
Leo aparecerá por el horizonte Este. Los meteoros, saldrán de esta constelación,
pero se dirigirán a cualquier parte del cielo. No es recomendable observar
directamente a Leo, sino a 45° de la constelación (tres o cuatro palmos).
Para observar las Leónidas de este año harán falta sobre todo ganas y
equipamiento para matar el frío (al menos en el Hemisferio Norte). Es
aconsejable huir de las grandes urbes y encontrar cielos lo más oscuros
posibles.
Si se presentara una actividad mayor a 300 met/h, sobrará cualquier
recomendación para la observación de meteoros: ver meteoros será no requerirá
ningún esfuerzo.