Millonario norteamericano de 60 años, Dennis Tito se convirtió en el primer
turista espacial pagando a la empresa MirCorp 20 millones de dólares por volar
al espacio. Hijo de inmigrantes italianos, se graduó en Astronáutica y
Aeronáutica en 1962. Trabajó en el Jet
Propulsion Laboratory, donde colaboró en el desarrollo de las naves
Mariner, que viajaron a Marte y Venus.
En los años 70 Tito entró en el mundo de los negocios de Wall
Street, llegando a fundar la empresa de inversiones Wilshire, donde ha
amasado una fortuna que hoy le permite habitar en una villa de 3
kilómetros cuadrados en la cima de una colina, coleccionar Ferraris y
embarcarse en proyectos filantrópicos como la construcción de un
laboratorio de investigación sobre el cáncer en la Universidad de
California. Se convirtió en la persona 403 en viajar al espacio.
El haber vivido los inicios la era espacial influyó mucho en Tito para
elegir su profesión e incluso estar posteriormente relacionado con el
medio al participar en el proyecto de los Mariner en el JPL.
Su sueño de viajar al espacio fue posible por varios factores. El primero
y muy importante fue el poder financiarlo. El segundo fue la posibilidad,
al crearse Mir Corporation, de visitar la Estacion Espacial Mir, en lo que
fue el compromiso original.
La situación se complicó cuando Rusia tuvo que tomar la decisión de
destruir la Estacion Mir, en la medida que su órbita estaba decayendo.
Esto trajo por consecuencia el tener que cumplir con el compromiso de Tito
y la alternativa fue la nueva Estacion Espacial Internacional, ISS.
Pero la ISS aun se encuentra en fase de ensamble. Además, la ISS es un navio
diseñado para trabajo y experimentación, distando mucho de tener las
condiciones de un hotel espacial.
De ahi vino la oposición por parte de Estados Unidos y los Paises Europeos
participantes en la ISS, a recibir a Tito. Finalmente, Daniel Goldin,
Administrador de la NASA, tuvo que optar por hacer una excepción y así
apoyar a los rusos que tambien participan en la estación.
Tito permanecio en la ISS del 30 de abril al 6 de mayo. Estuvo restringido
a permanecer en el módulo ruso y sólo efectuó visitas escoltadas al módulo
americano Destiny. Se dedicó a tomar fotografías, escuchar música y
disfrutar de la microgravedad, que sólo durante los dos primeros días le
ocasionó las típicas molestias de vómitos y mareos.
El hecho plantea ya la necesidad de adicionar a la ISS módulos especiales,
principalmente por iniciativa de los rusos, para continuar vendiendo
vuelos al espacio y mantener un ritmo en la visita de turistas. Por otra
parte, algunas compañías ya exploran la posibilidad de colocar en órbita
de la Tierra el primer hotel espacial.
Antonio Sánchez es astrónomo del Observatorio «Carl Sagan», en la
Universidad de Sonora (México).